El exdirector del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Félix Sanz Roldán, ha analizado en Metafuturo Bizkaia Quantum el panorama geopolítico y militar en un momento de gran inestabilidad e incertidumbre por las tensiones entre las grandes potencias mundiales.

"El orden mundial consiste en que nadie pueda con todos a la vez", explica Sanz Roldán. Una lógica que impera debido a que, desde que Donald Trump volvió a la Casa Blanca el pasado mes de enero, el presidente estadounidense "está en un polo, y en el otro está China, que cada vez es más fuerte y está acompañado por quienes no quieren vivir en los parámetros en los que viven las democracias".

"A este polo le distingue del otro las influencias que China ha sido capaz de generar", añade Sanz Roldán. Esa situación, sostiene, genera un orden bipolar en el que "hay una interdependencia entre los dos polos".

No obstante, con el republicano en la Casa Blanca todo está cuestionado, lo que "nos obliga a reflexionar sobre el orden mundial con mucha frecuencia, porque cambia de una forma acelerada", algo que, según el exdirector del CNI, "nos impide tomar las decisiones adecuadas para la estabilidad".

Esta situación, según el análisis de Sanz Roldán, se debe a que el pasado mes de enero "Trump le dio una patada al tablero y todo saltó por los aires". Sin embargo, cree que la situación es reconducible: "Tenemos la suerte de que todas las fichas vuelven a caer en el tablero. Ahora hay que recolocarlas, y para eso hace falta una inmensa paciencia".

Para recolocar esas fichas, Sanz Roldán recalca la importancia de "la preservación de nuestros valores" democráticos. "Eso es por lo que va a ser posible una paz en Ucrania y que se alce la voz por lo que ocurre en Gaza", asevera Félix Sanz Roldán para concluir su intervención en Metafuturo.