Cada vez son más los peques celíacos, hasta el punto de que, en la actualidad, uno de cada 200 o 250 niños padecen esta enfermedad, cuando hace unas décadas solo se diagnosticaban uno de cada 2.500 o 3.000 niños, según señala el pediatra del Servicio de Pediatría del Hospital Virgen de la Arrixaca, David Gil.

Esta enfermedad autoinmune, no es una alergia, sino que se caracteriza por la intolerancia a las proteínas del gluten y requiere una dieta sin esta sustancia "estricta y de por vida".

El aumento del número de casos se debe a la mejora de los medios para su diagnóstico, la colaboración entre pediatras y la Federación Nacional de Celiacos (FACE) y su labor divulgativa y, en parte, al aumento de la frecuencia de las enfermedades autoinmunes

De hecho, ahora en las farmacias ya disponen de un kit de diagnóstico para esta enfermedad, aunque es orientativo y siempre hay que acudir al pediatra si el pequeño presenta alguno de los síntomas.

¿Cuáles son estos síntomas? Los celiacos suelen padecer diarreas, irritabilidad, falta de peso, vómitos o dolor abdominal. Otros menos frecuentes son el dolor óseo o articular, la anemia o el estreñimiento

Los expertos también recomiendan poner énfasis en los grupos de riesgo, es decir, aquellos con enfermedades autoinmunes asociadas como la diabetes tipo I, la psoriasis o la dermatitis; algunas enfermedades neurológicas o psiquiátricas como la epilepsia o la esquizofrenia; o la fibromialgia o los trastornos genéticos asociados como el Síndrome de Down o el Síndrome de Turner.

La enfermedad se suele desarrollar en los primeros años de vida, pero quitar el gluten de la dieta del pequeño es suficiente para combatirla, sin necesidad de medicación.