Esta cifra supone seis víctimas mortales menos que en el mismo mes de 2024, un descenso que se produce en un contexto de mayor movilidad: los desplazamientos de largo recorrido aumentaron un 5,49% respecto al año anterior, alcanzando los 36,4 millones de movimientos a lo largo del mes.
En total, noviembre deja 76 siniestros mortales. Uno de los datos más relevantes es la disminución de las víctimas en carreteras convencionales, donde se contabilizan nueve fallecidos menos que en noviembre del año pasado. Este descenso contrasta con el incremento de usuarios vulnerables fallecidos, que aumenta en seis personas. Entre ellos destacan especialmente los motoristas, con cinco fallecidos más, y los usuarios de vehículos de movilidad personal, que suman dos víctimas adicionales respecto al mismo mes de 2024.
La tipología de los siniestros
En cuanto al tipo de accidentes que se dan en la carretera, también presenta variaciones significativas. Aumentan los fallecidos en colisiones frontales, traseras y múltiples, con nueve víctimas mortales más en conjunto. Por el contrario, se reduce el número de fallecidos en colisiones laterales y frontolaterales, que descienden en siete personas, así como en las salidas de vía, que registran once víctimas mortales menos que el año anterior. Este cambio en los patrones de siniestralidad refleja, según los datos, una evolución desigual según el tipo de accidente.
Un elemento especialmente preocupante sigue siendo el uso incorrecto, o directamente la ausencia, de los sistemas de seguridad. De los 81 fallecidos registrados en noviembre, seis no hacían uso de ningún dispositivo obligatorio. Cuatro conductores de turismo no llevaban el cinturón de seguridad en el momento del siniestro, mientras que un ciclista y un motorista circulaban sin casco reglamentario. La Dirección General de Tráfico recuerda de forma insistente que estos elementos reducen drásticamente la gravedad de las lesiones y continúan siendo un factor clave en la mortalidad vial.
La comunidad autónoma con más fallecidos en la carretera
Por comunidades autónomas, Andalucía se sitúa nuevamente como la región con más víctimas mortales durante el mes de noviembre, con 13 fallecidos. Pese a ello, mejora sus cifras respecto al mes anterior, ya que registra cuatro víctimas mortales menos. En el extremo opuesto se encuentran Navarra y La Rioja, donde la siniestralidad aumenta de forma notable, con tres fallecidos más en comparación con noviembre de 2024.
El análisis día a día muestra también contrastes importantes. El domingo 2 de noviembre fue el día más trágico del mes, con un total de ocho fallecidos. En cambio, noviembre dejó cuatro jornadas con cero víctimas mortales: el martes 4, el viernes 7, el miércoles 19 y el martes 25. Estas variaciones ponen de manifiesto la irregularidad que caracteriza a la siniestralidad vial en periodos cortos.
La tendencia a reducir los siniestros se ve contradice en noviembre
Durante el último fin de semana del mes, comprendido entre las 15:00 horas del viernes 28 y la medianoche del domingo 30, fallecieron diez personas en nueve siniestros mortales ocurridos en las carreteras españolas. El cierre mensual apunta así a un repunte temporal que contrasta con la tendencia general a la baja registrada durante todo el mes.
En el acumulado anual, desde el 1 de enero hasta el 30 de noviembre, han perdido la vida en las carreteras 1.024 personas, lo que supone 30 fallecidos menos que en el mismo periodo del año anterior. La tendencia a la reducción, aunque moderada, consolida una ligera mejoría respecto a 2024, si bien los datos continúan situando la seguridad vial como uno de los grandes retos pendientes.
