Así lo indica el informe del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Meteco), en el que concluye que no se alcanzan los objetivos de recogida separada establecidos en el artículo 59 de la Ley de Residuos y suelos contaminados para una economía circular.
El sistema de depósito, devolución y retorno es un mecanismo de gestión de envases usados en el que el consumidor debe pagar un dinero adicional al comprar un producto envasado, que le será reembolsado cuando devuelva el envase vacío. Esta fórmula, que recuerda al sistema tradicional que se usaba con las botellas de vidrio en el pasado, se aplicará a las botellas de plástico de un solo uso.
Según los cálculos del Miteco, en 2023, en España entraron en el mercado 214.039 toneladas de botellas de plástico, de las cuales 74.482 fueron recogidas separadamente por las Entidades Locales y otros 14.017, por recogidas privadas.
El resto -casi el 60 %- no retornaron al sistema, lo que puede suponer el incumplimiento del objetivo establecido por la Directiva (UE) 2019/904 del Parlamento Europeo, relativa a la reducción del impacto de determinados productos de plástico en el medioambiente, y se fijan unos objetivos intermedios en los años 2023 y 2027.
Hasta ahora, en España se está aplicando el Sistema Colectivo de Responsabilidad Ampliada del Productor (SCRAP), que es una fórmula sin ánimo de lucro que agrupa a fabricantes e importadores de productos que generan residuos.