La capa de ozono, ubicada en la estratósfera, protege al planeta de la radiación ultravioleta del sol. Su adelgazamiento aumenta el riesgo de problemas de salud como cáncer de piel y cataratas, además de afectar la agricultura y la biodiversidad.

Cada septiembre, se forma un agujero en la capa de ozono sobre la Antártida, un fenómeno identificado en la década de 1980 debido al impacto de los CFC utilizados en refrigerantes de los frigoríficos, aparatos de aire acondicionados, así como aerosoles y espumas aislantes.

La capa de ozono se habra recuperado para 2066
La capa de ozono se habra recuperado para 2066 | Sinc

Los científicos ya habían observado signos de recuperación, pero este estudio es el primero en demostrar que esta mejoría se debe a la reducción de las sustancias que destruyen el ozono. La investigadora Susan Solomon, del MIT, destacó que estos hallazgos confirman que es posible resolver problemas ambientales mediante acciones globales.

Para llegar a esta conclusión, el equipo utilizó simulaciones atmosféricas y un método llamado “huella dactilar”, desarrollado por Klaus Hasselmann, premio Nobel de Física en 2021, para aislar el efecto de la reducción de CFC sobre la recuperación de la capa de ozono. Los datos satelitales desde 2005 hasta la actualidad muestran que el proceso de restauración sigue fortaleciéndose.

Si la tendencia continúa, se espera que en 2035 la capa de ozono permanezca completamente intacta durante todo el año, lo que supondría el fin definitivo del agujero sobre la Antártida.