Para hacerle frente, este año se han unido a la campaña #BeatPlasticPollution, liderada por el PNUMA (Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente). Su objetivo se basa concienciar a las diferentes comunidades del planeta a buscar soluciones la situación actual de los plásticos.

Cada habitante del planeta consume una media de 50.000 partículas de plástico al año, sin contar lo que se consume por inhalación del aire. Esto es resultado directo de los residuos que contaminan mares y océanos, que afectan a la vida silvestre y a nosotros de manera indirecta.

Su infiltración en diferentes puntos de la Tierra es lo que Guterres resalta como “imperativo”: buscar de manera urgente un compromiso social real en la población, con perspectiva de crecimiento de cara a los próximos años.

El secretario general de la ONU, también destaca la creación de políticas para reducir los plásticos de un solo uso, así como cubrir su ciclo de vida a través de economías circulares y alinearse objetivos medioambientales más amplios. Y, así, responder a las necesidades de las comunidades y aplicar su uso de manera inmediata.

De cara al mes de agosto se retomarán conversaciones para encontrar un tratado que el mundo necesita urgentemente, dejando de lado las diferentes que existen entre los puntos de vista de cada país.